Algunas recomendaciones para cuidar nuestras articulaciones, músculos y huesos:
- Seguir una dieta variada, tu alimentación debe ser equilibrada y rica sobre todo en vitaminas A, C, D, calcio y ácidos grasos Omega-3. Además, bebé agua en abundancia y rehidratate tras realizar esfuerzos.
- Hacer ejercicio regularmente para mantener un buen tono muscular, aunque la intensidad de la actividad física debe depender siempre de la edad y del estado físico de cada persona. El ejercicio moderado más recomendable es nadar, pedalear o caminar. Pero siempre debés realizar un buen calentamiento antes de comenzar, y ejercicios de estiramiento y enfriamiento al acabar. No te olvides de proporcionar a los músculos el tiempo de descanso y de recuperación suficiente.
- Utilizar el calzado adecuado para practicar un deporte. Al realizar deporte, tu calzado debe sujetar bien el pie y proporcionar la amortiguación necesaria para la actividad que estás realizando.
- Procurar mantenerse en tu peso ideal. Tené en cuenta que cada kilo de más ejerce aproximadamente cinco kilos extra de presión sobre la rótula al bajar o subir escaleras, y una pérdida de 5 kg disminuye en un 50% los síntomas asociados a los dolores de rodilla.
- Reducir el riesgo de caídas y no hacer esfuerzos por encima de tus posibilidades. No hay que olvidarse de que la imprudencia es el principal factor de riesgo.
- Descansar adecuadamente.
- De haber sufrido anteriormente otro tipo de lesión en la rodilla, usar rodilleras o un vendaje elástico. Las rodilleras son una solución terapéutica muy adecuada para prevenir y tratar las lesiones o dolor en esta articulación. Las terapias de frío/calor también son muy recomendables para aliviar el dolor y las molestias relacionadas con traumatismos, fracturas, distensiones que afectan a la rodilla.
- Mantener siempre una buena postura en todas las actividades que se realicen.
- Ir al médico en cuanto sientas dolor. Si comienza a dolerte la rodilla, acudí a tu médico cuanto antes, con el fin de prevenir lesiones graves. También antes de realizar deportes de riesgo, sería recomendable que te sometas a un reconocimiento médico para cerciorarte de que tus rodillas se encuentran en óptimo estado. Seguí las indicaciones del especialista en cuanto al tratamiento, farmacológico o no.
